procrastinación emocional

Procrastinación Emocional: Véncela y Recupera tu Bienestar

La procrastinación emocional se produce cuando aplazamos un determinado sentimiento o emoción, habitualmente por miedo a enfrentarnos a nosotros mismos.

En este artículo vamos a definir de forma precisa en qué consiste la procrastinación emocional. Además, te vamos a dar claves y consejos para que te armes de valor y enfrentes aquellos sentimientos que a día de hoy te están produciendo bloqueos emocionales y no te dejan vivir con la paz y la armonía que seguro estás buscando en tu vida.

La procrastinación emocional es un problema que se puede superar con la ayuda de un coach emocional. Si no encuentras la manera de enfrentarte a tus miedos, no sabes cómo expresar tus sentimientos y esto te lleva a aplazar de manera sistemática determinadas situaciones de tu vida, el coaching emocional te puede ayudar enormemente. Reserva una primera consulta gratuita y sin compromiso y comienza ya a vivir en plenitud:

persona dando un salto

¿En qué se diferencia la procrastinación emocional de la clásica?

El término procrastinación ha emergido con fuerza y, actualmente, es fácil encontrar a coaches y motivadores personales con cursos y prácticas para que dejes de procrastinar. Seguro que en YouTube o redes sociales te ha saltado algún anuncio en el que te han contado que la procrastinación es, básicamente, una actitud que nos lleva a aplazar de manera sistemática nuestros deberes y quehaceres diarios. Y muy probablemente, en esos anuncios, también has podido comprobar cómo, a través del servicio ofertado, puedes pasar a la acción y mejorar tu productividad.

Con esta descripción no estamos menospreciando ni mucho menos a quienes ofrecen este servicio. Es más, es de justicia reconocer que la labor de estos coaches está promoviendo un cambio de conciencia positivo en la sociedad. De hecho, en este portal también puedes encontrar a fantásticos coaches emocionales que te pueden ayudar a combatir la procrastinación clásica, es decir, aquella basada en combatir la inoperancia en lo material, en las acciones de nuestra rutina.

Ahora bien ¿En qué se diferencia entonces la procrastinación emocional de la que podemos denominar como “tradicional”?

Procrastinación emocional Vs Procrastinación clásica

Podemos decir que la procrastinación emocional se diferencia de la clásica  en que la emocional afecta a sentimientos y emociones que decidimos ignorar o aplazar frente a acciones que decidimos postergar, lo que correspondería al concepto tradicional de procrastinación.

De este modo, y con la intención de aclararte aún más los elementos diferenciadores de la procrastinación emocional frente a la clásica, podemos decir que son frases típicas de la procrastinación emocional algunas de las aquí listadas:

– Ya le diré que le quiero o, incluso, no sé cómo decirle que le quiero.

– Me da miedo una situación, así que voy a evadirme y evitaré pensar en ello.

– Prefiero mantenerme en mi zona de confort y no pensar en el cambio.

– Me da vergüenza decirle lo que siento, prefiero omitirlo.

– Estoy muy agradecido a una persona, pero tengo un tabú a la hora de expresar mi gratitud.

– Valoro enormemente a una persona, pero no sé cómo decirle lo que siento ni cómo reconocer sus aptitudes.

– Sé que se está generando una gran distancia en mi relación pero no sé cómo comunicarle a mi pareja lo que siento.

– Me siento infravalorado y como no sé expresar lo que siento, aplazo sistemáticamente mis sentimientos al respecto.

¿Te has sentido identificado con alguno de los ejemplos que hemos listado? Si es así, es más que probable que estés experimentando procrastinación emocional.

Ahora que ya sabes en qué consiste este tipo de procrastinación y en qué se diferencia de la clásica es momento de pasar a la acción y atender a cómo podemos vencer la procrastinación emocional.

¿En qué se diferencia la procrastinación emocional de la clásica?

Cuando hablamos de vencer la procrastinación que hemos definido como “clásica” o “tradicional” lo hacemos desde el punto de vista de las acciones físicas. En estos casos se trata de fomentar una actitud que rompa la tradicional pereza y nos haga movernos y pasar a la acción para acometer nuestras tareas del día a día con efectividad y sentido de la plenitud.

En el caso de la procrastinación emocional el trabajo es más un proceso de introspección a nivel de sentimientos y emociones, lo cual requiere de una labor de autoconocimiento y aceptación más sutil y profunda.

A continuación vamos a ofrecer una serie de consejos que te van a ayudar a mejorar la procrastinación emocional. No obstante, y como siempre decimos, todo proceso de reparación emocional requiere de un trabajo arduo y muy profundo. Por este motivo, lo aconsejable es iniciar este camino hacia la plenitud de la mano de un coach experimentado que te guíe en el proceso.

Si quieres comenzar este camino ayudado por un profesional, no lo dudes y reserva una consulta gratuita y sin compromiso para exponer tu caso y recibir consejo y orientación.

Y, ahora, sí, vamos con los consejos:

Observa tus sentimientos y emociones sin juicio

Este sería el primer paso o ejercicio que sin duda recomendaríamos a una persona que quiere vencer la procrastinación emocional.

Muy probablemente postergas tus sentimientos y emociones sobre un determinado tema porque cuando atiendes a esta situación lo haces a través del juicio y un acusado sentimiento de culpa.

Por esta razón, es importante que te permitas sentir aquello que habitualmente evitas o aplazas desde un punto de vista imparcial. Simplemente atiende a ese sentimiento o emoción con una intención descriptiva. Si te ayuda, puedes escribir de una manera aséptica el sentimiento o emoción en un cuaderno.

Se trata de que tengas bien identificado qué es lo que hasta ahora no te atrevías a sentir para, posteriormente, definir qué hacer con ese sentimiento que hasta ahora evaluabas desde el juicio y la culpa.

Comparte con alguien de tu círculo de confianza aquello que postergas

Ahora que ya has hecho el ejercicio de identificar sin juicio aquello que hasta ahora estabas decidiendo no sentir, una buena práctica puede ser que tengas el atrevimiento de ponerlo en común con alguien de tu confianza.

El hecho de verbalizar estos sentimientos o emociones que hasta ahora evitabas ya te está situando en una posición de afrontar el asunto, y este es un paso importante, cuando no el antídoto, de la procrastinación emocional.

Sentir desde la aceptación y el compromiso

Cuando ya hayas dado el paso de afrontar los sentimientos y emociones que antes aplazabas, ahora hay que lograr lo que quizás es el punto más complicado: aceptar esta circunstancia y adquirir un compromiso de mejora.

Una práctica que te puede ayudar a aceptar estos sentimientos que tanta incomodidad te están produciendo puede ser la visualización creativa.

Si recuerdas, en el primer punto hablábamos de cómo evitabas los sentimientos negativos porque, habitualmente, los visualizabas desde la culpa y el juicio. ¿Y si ahora los visualizáramos desde la compasión, la aceptación y el compromiso?

Cuando afrontes el sentimiento o emoción que te producían procrastinación emocional, esos que ahora has identificado con precisión e incluso has compartido con alguien de confianza, hazlo a través de un diálogo interno basado en el perdón.

Perdónate a ti mismo/a para, a continuación, visualizarte sintiendo esas sensaciones antes nocivas con una actitud positiva y reparadora. Cuando lo hagas, es importante que te lo creas realmente, hasta el punto de experimentar una emoción de gratitud y paz por haber reparado estas emociones que antes te perjudicaban.

Diversos autores, entre ellos Gregg Braden (Secretos de un modo de orar olvidado, 2006) aluden a la emoción y la compasión como los lenguajes que nos conectan con la supraconciencia, la matrix o la divinidad que rige todo. Por ello, es importante que pasemos de un plano meramente imaginativo a otro que nos haga sentir de verdad las emociones positivas que resultarían de haber reparado los daños emocionales que antes evitábamos para no herirnos.

Si quieres ahondar en los estudios de autores como Braden acerca de las emociones y su impacto en nuestro cuerpo, puedes hacerlo leyendo este post sobre emociones y salud
.

Prácticas complementarias

De manera complementaria, es importante que todo este proceso trates de llevarlo a cabo, en la medida de lo posible, bajo un estado de paz.

Por ello, te recomendamos que practiques, al menos unos minutos al día, mindfulness, yoga, meditación o aquella práctica que mejor conecte con tu personalidad y tenga como finalidad vaciar la mente durante un espacio de tiempo que reserves para ti.

En este estado de paz y armonía te resultará mucho más fácil observar tus emociones y llevar a cabo la práctica de visualización creativa que hemos descrito anteriormente.

Conclusión

Como reflexión final, queremos destacar la importancia que, a día de hoy, cada vez más gente le da a su salud emocional. Cada vez son más las personas que están tomando la decisión de vivir de una manera consciente y alejados del automatismo y el frenesí que nos impone la sociedad.

Dentro de este grupo de personas, a las que seguro perteneces si has llegado a este artículo, también se encuentran quienes han optado por atender a sus emociones con la intención de sanar aquellos sentimientos que hasta ahora aplazaban sistemáticamente hasta el punto de ocasionar profundas heridas emocionales.

Abandonar la procrastinación emocional y tomar la decisión de enfrentar aquellas partes de tu ser que hasta ahora decidías ocultar, es una decisión valiente que te llevará a vivir en plenitud y, lo más importante, consciente.

Quien decide dejar de procrastinar en el plano emocional también decide vivir con un para qué más trascendente. Ser conscientes de que nuestra misión en el mundo va más allá de la productividad y nuestra capacidad de ser útiles en el plano material es una importante decisión que empieza por permitirnos sentir sin juicio lo que hasta ahora, quizás también condicionados por los cánones sociales, evitábamos experimentar porque nos hacía daño.

Por todo ello, vencer la procrastinación emocional supone comprometernos no sólo con nosotros mismos sino con ofrecerle al mundo nuestra mejor versión, sin duda, un gran acto de generosidad que afectará positivamente a nuestro entorno.

Y como te hemos dicho, si quieres iniciar este proceso de cambio de la mano de un coach emocional profesional como los que vas a encontrar en este portal, te invitamos a que reserves una primera consulta gratuita y sin compromiso.

Te esperamos y te deseamos lo mejor.

El propósito de este artículo es meramente divulgativo y, en todo caso, motivacional e informativo. El contenido de este post no pretende funcionar como diagnóstico y en ningún caso sustituye la valoración de un profesional de la salud. Si crees que padeces problemas de salud mental, te invitamos a que acudas a un profesional habilitado para el tratamiento de tu caso concreto.

Compartir:

Entradas Relacionadas